lunes, 13 de octubre de 2008

Enrique Santos Discépolo

Trabajo de investigación

Enrique Santos Discepolo



Integrantes del grupo:

- Gauna Emanuel
- Francisco Rodríguez
- Franco Ratzkov

Profesor: Cieri Ramón

“Instituto José Manuel Estrada”

Curso: 1º Polimodal

Fecha de entrega: 14/08/07










Hipótesis

E
nrique Santos Discepolo es uno de los referentes mas importantes de nuestra música ciudadana. ¿Cómo un hijo de inmigrante pudo integrarse a la sociedad y al mundo cultural de la época? ¿qué lo llevo a interpretar en sus letras el pensamiento argentino?
Es admirable la forma en que Discepolo pudo desenvolverse de una manera brillante dentro de la sociedad sin contar con el apoyo paterno.
Compartimos las afirmaciones del escritor Sergio Pujol cuando dice que Discepolo forma parte del sentido común de los argentinos, porque desde un punto de vista negativo, en sus letras fueron profecías que se cumplirían. Un ejemplo muy claro es el tango “Cambalache”.
Creemos que la historia familiar de Discepolo, las experiencias difíciles, el haber vivido en una época de cambios enriquecieron su vida y de tal manera que el pudo volcar todo en su arte.











Su vida de artista

E
nrique Santos Discepolo nació en el barrio porteño de Once el 27 de marzo de 1901 en una familia que sentía la música.
En 1911 su hermano Armando se caso y lo lleva a vivir con el. Ahí retoma los estudios de música en honor a su padre .
En el año 1924 estando en Montevideo estrena su primer tango “Biscochito” (letra: José A. Salidas ), y un año mas tarde escribirían “El organito” junto a su hermano y “Que va-cha-ché” que describía la situación social que atravesaba el país.
A partir de aquí todas sus letras tendrían un toque dramático y catastrófico y mucho dolor oculto.
Su pasión era el estudio y no perdía oportunidad de leer algún libro que le dejara algunos conocimientos, sus amigos se dividían en dos grupos: los actores y los intelectuales, siempre extremistas.
Discepolo se transformo en la “Voz del pueblo” mimetizándose con el dolor, el abandono y la injusticia que se ejercía con los porteños en esos años.
En esa misma época escribió varios éxitos, uno tras otro como “Esta noche me emborracho”, “Chorra”, “Soy un arlequín”, “Yira yira”, “Victoria”, “Que sepa señor”, “Señor de juventud”.
Los historiadores a modo de anécdota que el tango “Esta noche me emborracho” no querían cantarlo, hasta que después de tanto vagar consigue que Azucena Maizani lo interpretara y se convirtió en un éxito. Con este mismo tango es que casi por azar conoció a la que seria la compañera de toda su vida: Tania.
Otras de las obras que ayudaron a forjar su éxito fue el tango “Confesión” que realiza en conjunto con Luiz Cesar Amador, “carillón de la merced” con la participación de Alfredo Le Pera y “Quien mas quien menos”.
En 1935 realiza una extensa gira por Europa y el norte de África, lugares en los que actuó y brindo numerosas conferencias.
De vuelta en Buenos Aires formo su propio conjunto con el que se presento en Radio Municipal y realizo varia grabaciones para la casa víctor.
Paralelamente no dejaba de componer y en esa época dejo: “Cambalache” “Alma de bandoneón”, “Melodía porteña” “Desencanto” con colaboración de Amador, “Tormenta”, “Martirio”, “Infamia”, “Uno” con música de Mariano Mores y “Canción desesperada”.
En la ultima etapa de su vida estreno “El choclo”, “Sin palabras” y “Cafetín de Buenos Aires”.

Enrique Santos Discepolo falleció en Buenos Aires el 23 de diciembre de 1951, causando un gran dolor a todos los argentinos que disfrutaban sus creaciones, ya que era uno de los pocos poetas al que consideraban como su propia voz.



Un mal momento para el músico

En 1926 Discepolo creo “Que Va-che-ché” la actriz Mecha Delgado fue la encargada de interpretar el tango por primera vez. Lamentablemente, la reacción del publico no fue la esperada para quienes lo escucharon, aquel tango no significaba ningún aporte para el genero. El periodista uruguayo Blixen Ramírez le vaticino al autor un futuro oscuro: “este muchacho en su vida escribirá un tango”. Era un momento difícil para Enrique, pero los contratiempo no lo desanimaron.
En octubre de 1927 Gardel escucho “Que-va-cha-ché” y lo incluyo en su repertorio. Discepolo cuenta que cuando se entero estaba muy feliz pero no tenia con quien compartir su alegría, de pronto descubrió que en el sucio camarín alguien lo acompañaba... era una pulga. En aquel camarín las pulga abundaban





















Su familia

Su padre, Santo Discepolo era de origen italiano, músico director y maestro.
Su madre, Luisa Deluchi, era ama de casa y cuidaba a sus cuatro hijos, de los que Enrique era el menor.
Según el mismo declaro en varias oportunidades su infancia fue muy dura y triste: con cinco años recién cumplidos de soportar la perdida de su padre a causa de un cáncer fulminante.
El dolor fue inmenso, no solo para Discepolo, sino también para su madre que cayo en una profunda depresión que la llevo a una tuberculosis que le quito la vida tres años después después de la muerte de su marido.
Con todo el dolor de convertirse en huérfano se va a vivir con una tías y su hermana Otilia, pero no recuerdo con agrado esa experiencia como lo declaro en un reportaje a un periodista cuando dijo: “Tenia que dormir bien quieto para molestar a esa gente”.















Tiempos difíciles

No hay duda que Discepolo no solo se integro a la sociedad de su época a través de su trabajo artístico, sino que el vivía muy atento a todo lo que sucedía a nivel político. En 1928 Enrique compartía la opinión general de que Irigoyen no estaba en condiciones de gobernar el país. Sin embargo reconocía que el pueblo había respaldado a su presidente de una manera muy especial.
El escritor Sergio Pujol, en la biografía de Discepolo afirma que “en alguna medida, Irigoyen había sido en la política lo que Discepolo en la canción”. Los dos supieron interpretar lo que las nuevas clases sociales sentían.
En la mañana del 6 de septiembre de 1929 el general Uriburu dirigió a los cadetes del Colegio Militar hacia la casa de gobierno. Muy pocos argentinos protestaron y los periodista que Enrique admiraba salieron a festejar el cambio de gobierno. Se avecinaba la crisis nacional y la de toda una generación a la que Enrique pertenecía.
Este es el contexto histórico en el que Discepolo creo sus letras. Aunque Discepolo iba mas allá de lo que sucedía en nuestro país, simplemente enmarcaba la decadencia en un contexto internacional. Discepolo era muy conciente de la situación social de nuestro país, del sufrimiento de los inmigrantes. El ingenio popular llamo Villa Desocupación a una zona de Buenos Aires donde afloraba la miseria. Enrique veía como los políticos se alejaban cada vez mas de la gente. Tenia la sensación de que la realidad le copiaba las ideas de sus tangos. En los años siguientes el vio con sorpresa como algunas de sus composiciones cobraban significado de profecía.
En sus tangos, Discepolo critico duramente al mundo contemporáneo y a la condición humana, pero vivía pendiente de la evaluación que los demás hacían de su obra. El decía que el publico no es un juez, sino la suprema corte que no admite apelación







Conclusión

Indudablemente Enrique Santos Discepolo tubo una vida muy rica en experiencias y un talento que le permitió expresar todo lo que vivió en las letras de sus tangos además, por los datos que tenemos sobre su vida hemos visto que Discepolo observaba detenidamente a las personas, sus actitudes, su entorno y sabia interpretar los sentimientos. Esto le proporcionaba el material para sus composiciones.
Por otro lado Discepolo mantenía un interés constante en lo que pasaba mas allá de su entorno familiar y laboral. Tal vez fue un privilegio que viviera en épocas de cambios y en tiempos difíciles. Tal vez el supo convivir con diferentes clases de personas todo esto combinado con su talento fue la formula para que surja un artista que tubo tanta trascendencia

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